Hoy, en el programa de Telecinco "Mujeres, hombres y viceversa" se ha producido la final del tronista Oliver, que tras 9 meses en el trono, lo ha abandonado solo.
No ha sido una final común, sino distinta a todo lo anterior. Recordemos que Oliver, ya se marcho una vez solo pero volvió de nuevo al programa con nuevas tronistas. Pero ahora, en su última etapa vuelve a ocurrir lo mismo. Y es que está visto que el tronista no va a encontrar el amor en este programa.
Durante el transcurso del programa, hemos descubierto el lado más sincero y puro de Oliver. No ha sido fácil, puesto que su primera etapa en el programa fue un poco "concurrida de más". Pero tras su vuelta, conocimos el lado más honesto del tronista.
Su paso por el programa ha sido muy turbulento, por la infinidad de "confidencias" sacadas a la luz por Tamara, las cuales al final no han podido ser probadas. Todos hemos dudado alguna vez de él, pero al final nos hemos tenido que callar la boca.
Como, he dicho anteriormente, nos ha costado mucho conocer a Oliver en sí. Es una de esas personas inaccesibles a sus sentimientos, aunque poco a poco fue abriéndose a la audiencia.
Esto es algo que, personalmente, he agradecido mucho, porque, Oliver es una persona que, dentro de él, tiene un gran fondo, pero que por circunstancias de la vida, se ha hecho un muro infranqueable.
Poco a poco, fue contando cosas de aspectos de su vida, y comprobamos como había tenido una vida muy difícil.
La relación con sus padres estaba muy deteriorada, cosa que al final se solucionó dentro del programa y que nos ofreció un gran reencuentro entre ellos. Por su separación con sus padres, vivió en un centro de menores dónde su paso por allí no fue nada fácil. Prueba de ello fueron las lágrimas que derramó en uno de los programas donde contó algunos de los aspectos que le llevaron a abandonar su casa con 17 años.
En definitiva, su marcha del programa ha desatado diferentes polémicas, pero lo que está claro es que ha dejado un hueco que dejará recuerdo en muchas mentes.
En mi caso, reconozco que es un programa en el que es imposible encontrar el amor, por mucho que ese sea su objetivo. Pero en algún caso me he sentido identificada con la situación, porque todos hemos tenido a una persona así en nuestras vidas, y el esfuerzo por comprenderlas e intentar ayudarlas recompensa pero en muchos casos se queda cojo.
Muchas personas han criticado a Oliver por su actitud, pero una persona que actúa de esa forma, lo hace por alguna razón. Y esa actitud de creído o prepotente que tenía al principio es cierto modo, es normal. Alguien actúa así en muchos casos, para formar una barrera a su corazón o sus sentimientos para que no le hagan daño, pero lo malo de estos casos es que, esa coraza que forman a su alrededor, les impide ser felices. Las personas espontáneas disfrutan de ese privilegio, de expresar lo que sienten sin miedos a nada, aprovechan el momento sin pensar en nada, sin llegar a ser tan meticulosos o medir tanto las situaciones.
En cualquier lugar, al final, como le ha pasado a Oliver, los sentimientos afloran y las verdades salen a la luz, y en ese momento es en el que realmente consigue sentirse bien con los demás, pero sobre todo, consigo mismo.
